El Morral

Estos días han transcurrido en una tranquilidad espeluznante, están habiendo cambios en mi vida, que no se notan. No son esas bombas emocionales que suelen sucederme, son cambios sutiles como movimientos de placas tectónicas imperceptibles, sin embargo, un temblor de regular intensidad está sucediendo y no nos estamos dando cuenta. O tal vez, si y me rehusó a hacer algo. Después de salir con el tipo que conocí con esa aplicación para encontrar pareja no le hablé más y él tampoco a mí. Los 2 nos dimos cuenta que no éramos compatibles. Fue absurdo y lo sigue siendo tratar de forzar al destino con ese tipo de encuentros. No creo necesitar otra lección más acerca del tema. Moraleja: el amor no está en una aplicación / Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. He comenzado las clases de canto nuevamente. Quisiera sentirme tan pleno con eso y lo hago, pero mi inseguridad frente a todo me malogra la existencia. Cada vez que hago algo malo siento que ya no sirvo para eso y qu...

Estuvo a punto de suceder nuevamente, la primavera atacó pero ahora ya no la tendrá tan fácil. Ya la conozco, es una antigua enemiga pero el invierno me ha hecho fuerte, daré batalla. No cuenta con que ahora tengo un cerebro autónomo del corazón y espero seguir así. Hace unos días he descargado una aplicación para conocer gente, se llama Tinder, para la gente actual no se necesita explicación pero para las futuras generaciones, era una aplicación de Smartphone donde marcabas a las personas que te gustaban y las que no te atraían deslizando su foto  a un lado o al otro. Si un par de personas marcaban q se gustaban podían empezar a interactuar.  Pues bien, hace días vengo usándola sin mas fin que el de poner “Like” y “Nope” a las fotos, hasta que ayer, domingo, una persona a la que le puse “like” me comenzó a hablar y yo, muy ducho en el tema, le comencé a hablar sin interés, como siempre hago. La persona se volvió insistente y como fui respondiéndole, dentro de mi indi...