Enamorando al analizado
Estuvo a punto de
suceder nuevamente, la primavera atacó pero ahora ya no la tendrá tan fácil. Ya
la conozco, es una antigua enemiga pero el invierno me ha hecho fuerte, daré
batalla. No cuenta con que ahora tengo un cerebro autónomo del corazón y espero
seguir así.
Hace unos días he
descargado una aplicación para conocer gente, se llama Tinder, para la gente
actual no se necesita explicación pero para las futuras generaciones, era una
aplicación de Smartphone donde marcabas a las personas que te gustaban y las
que no te atraían deslizando su foto a
un lado o al otro. Si un par de personas marcaban q se gustaban podían empezar
a interactuar. Pues bien, hace días
vengo usándola sin mas fin que el de poner “Like” y “Nope” a las fotos, hasta
que ayer, domingo, una persona a la que le puse “like” me comenzó a hablar y
yo, muy ducho en el tema, le comencé a hablar sin interés, como siempre hago.
La persona se volvió
insistente y como fui respondiéndole, dentro de mi indiferencia, le comencé a
tomar importancia y así comenzó una amena conversación que ya ha durado día y
medio. El susodicho se llama Diego. Me ha caído de lo más simpático, es lindo,
casi de mi tamaño, con cerebro, y lo más importante, con 30 años. Parece que
piensa. Sin embargo con respecto al amor me resulta algo iluso aún.
Se parece a mí antes
de Sebas o sino hasta antes de Manuel, esos tiempos en los q creía que el amor
estaba para coger en los arboles como manzanas dulces y no sabía que había q
plantar todo el árbol antes de decir “amor”. Lo relaciono mucho con Christian,
el chico que me parece muy maduro pero que a la vez es tan voluble en el amor y
tan apasionado que tuve q rechazarlo por eso mismo, no había freno en él.
Espero que Diego no sea así, con 30 años espero que algo de experiencias en
relaciones hayan entrado en él y que la percepción que tengo sea solo una mala
impresión.
Al hablar con él note
que la ilusión ya se plasmaba en sus palabras, era casi palpable. A lo que mi
experiencia respondió con toda la madurez y sutileza que la caracteriza. Aún
así, el hombre parece que no entiende razones, piensa que si la circunstancia
se relantiza, se pierde interés, cuando solamente se pide ir más lento pero el
interés permanece. ¿Se podrá deber a un tipo de trauma? ¿O solo es la pasión
que brota de él a chorros y sus ganas locas de amar?
Veamos su progreso,
pero estoy notando patrones interesantes en él y en Christian que los hacen muy
parecidos, uno de ellos es q ambos les encantan los niños, puedo decir que las
personas con mas afecto hacia ellos tienden a ser apasionadas ya sea en su vida
diaria y en sus relaciones mucho más. Vamos a ver cómo va esta semana, tenemos
estos días para ver su desarrollo y hasta el sábado para verlo. Esto ya parece
estudio de caso clínico de un virus contagioso en potencia, pero ¿Quién sabe?
Estas observaciones me pueden conducir a algo…
Comentarios
Publicar un comentario