Mi loco amor
Ha pasado algo más de un mes, algo más de 31 días, y hay algunas cosas más que tal vez deben o no deben permanecer en la memoria. ¿Pero 31 días de qué? 31 días cumplidos, 1 mes entero de estar con el Señor Pingüino. Aquí no hay contraste de felicidad y tristeza, hay una pelea entre gozo y miedo, un miedo que ya se ha hecho más chiquito y anda encerrado pero latente, es una inseguridad existente y que oscurece mi panorama pero que no le hago caso. No escribiré más acerca de mi miedo en ese post, hay mucho que escribir. Mi Señor Pingüino y yo cumplimos un mes el 15 de abril. Un día agitado para ambos, el volvía de su enésima actividad diaria, y yo de haber trabajado todo el día. Y nos vimos solo un rato, para entregarnos los obsequios y decirnos presencialmente cuanto nos queremos. Su regalo, dentro de su simpleza, fue como un estallido en mi cabeza, que haya utilizado tiempo para pegar, escribir, utilizar colores, cortar me emocionó mucho; tengo problemas en recibir regalos porque ...