El Morral

Hoy me molesta todo… desde que me levante siento que no encajo en el día, me siento disconforme con lo que hago y dejo de hacer. Para estos casos siempre es bueno hablar con amigos, o en mi caso ser sincero. Pero al ser sincero creo que molestaría a varios así que no me queda más que soltar toda mi sinceridad por acá. Estoy harto de los mensajes de en el muro del Facebook donde toda la gente publica cosas que a los demás no les importa, ¡nadie quiere saber que te duele el pelo! Odio que publiquen cosas así. Me llega la gente que me dice que quiere estar conmigo cuando yo no. No me gustan los ofrecidos. ¿Dónde están los difíciles cuando se les llama? ¿Por qué no seré mas extrovertido? Me molestan los ofrecimientos que pone el Facebook de gente que “tal vez conozca” no me gusta agregar a gente así por así, siento que me humillo, ante algo que requiero. El orgullo es primero. Odio mi MSN que se me para colgando. Odio el transporte público ya sea bus o taxi. No me gusta saber de ...

Ha sido una semana rara, trabajo pesado, sentimientos guardados, sin embargo, las ilusiones vuelan descaradamente. Hay un chico, que creo que anteriormente mencione, que me gusta. Estudia conmigo en las clases de inglés, pero aun no sé si es o no es gay. Hay otro que tampoco se definirlo, pero puedo decir q es gay con mas certeza que el anterior y tiene el nombre que marco el 2012 para mí. Con el primero solo hay miradas furtivas y evasivas, con el segundo hay pequeñas conversaciones, pero son diálogos mínimos. Debo decir que hay un tercero que recién apareció esta semana, es más, hace dos días, es mi vecino, o creo que vive por acá. Es un poco descarado porque me mira sin disimulo. Es simpático y alto. Y esa sensación que me causa me gusta. Sería capaz de comenzarle el habla para verlo avergonzarse un poco. Lo veo como un admirador mío. No soy nada presumido ¿no? Los dos de la clase de inglés me gustan, ambos son mayores que yo, uno más que otro. Obviamente el que me gusta m...

Ya me había cansado. Era tiempo de un cambio, mi vanidad había alcanzado niveles exorbitantes y no tenía idea de lo que en verdad deseaba. ¿Cómo llegue a esta conclusión? Tener a 3 personas diciendo lo que siempre quieres escuchar como: eres tan guapo, te ves demasiado bien, siempre quise estar contigo y tú no me haces caso. Eran frases que alzaban mi ego a niveles exorbitantes. Ni yo mismo me aguantaba en ese estado. Y lo más gracioso de eso es que, en mi vida he visto a esas 3 personas cara a cara. Cosas de la web. No quiero caer pesado ni presumido contando esto, es algo que le puede pasar a cualquiera que vende una imagen que no es de sí mismo. Que solo muestra lo que otros desean ver y actúan de acuerdo a las necesidades (amorosas) del público en general. Esa es la clave del éxito con mujeres y hombres: siempre ser asertivo y empático; pero ese no es el punto. Esas cosas que vienen fáciles son muy banales, esas palabras que nada me ha costado recibirlas, no me agradaban. No ...

Hoy te vi, estabas tal y como te recuerdo, nos vimos en esos momentos en los cuales uno no piensa en nada y solo espera que algo le abra los ojos para chocarse con la realidad. Eso fuiste tú. Estabas tal y como t recuerdo, tal vez algo más bajo, pero debió ser mi imaginación. Pensé que me tratarías apáticamente, como era tu costumbre, pero algo había cambiado en ti. Era como si te hubieras transformado a lo que siempre quise que fueras: más cariñoso, dulce, cordial. Me deje llevar un poco por tu nueva personalidad, hablamos muy bien ambos; nos dijimos mucho, quizá esa cantidad de palabras haya sido suficiente. Me contabas lo mucho que me extrañabas, de cómo hubieras querido que sucedieran las cosas. Lastimosamente si hubieras llegado un poco antes, la sonrisa en mi cara estaría indeleble desde nuestro encuentro; sin embargo, ya no provocas más que brisa cuando hablas hacia mí. Y no siento cosquillas en el estomagó. No me siento en las nubes con tus palabras, no significo m...

Dos días en la región del sur. Tengo que decir que es algo aburrida, no hay mucho que ver en mi opinión o tal vez no vi mucho de lo que debía. Las cosas que más me gustaron fueron las historias de ciertos lugares. Son relatos llenos de magia, que han durado mucho tiempo, como cuento de abuelo donde parece que las sirenas y brujas están acompañándote. Los lugares mágicos están fuera de la ciudad. Un oasis en medio del desierto, donde vive una sirena narcisista. Un pueblo fantasma donde las brujas peleaban como si fueran amazonas, unas buenas y otras perversas.   Huacca-china era una bella doncella que solía pasear en el desierto y divertirse peinándose y viendo su reflejo en su espejo de cristal que siempre cargaba. Un cazador, admirado por la belleza de la joven, la esperó un día cerca de donde ella iba para su ritual de belleza diario con su espejo y peine. La espero detrás de una palmera; Huacca-China al darse cuenta, comenzó a correr tirando sus ropas y objetos. ...

Comenzamos el viaje. ¿Alegría? Más bien desgano, irnos al sur, donde, a mi parecer, es zona desértica no me entusiasme mucho. Sin embargo, fui. Quedarme solo en casa era algo depresivo. Me aventure sin pensar en la primera parte del camino, ese camino que pase algún día agarrado de la mano con alguien al volante y yo sintiéndome el más gay de todos como copiloto jajaja. Me acuerdo que no hablamos mucho en el camino (como se volvió nuestra costumbre)... Solo alguna canción casual nos abría un tema de conversación. De todas maneras recuerdo eso con demasiada felicidad, al parecer, aunque no era mi idea de una relación ideal, fue una época muy feliz en mi vida.  Mi corazón se moría por querer y se moría por ti, sigo pensando en esos días. La euforia de haberte tenido al lado no pasa. Parece que mi soledad se ha vuelto tu amiga, ya que siempre que llega ella, llegas tú. Mis recuerdos siempre van a ese mar... Se clavan en la arena, no desaparecen...