"Ilusionías"


Ha sido una semana rara, trabajo pesado, sentimientos guardados, sin embargo, las ilusiones vuelan descaradamente. Hay un chico, que creo que anteriormente mencione, que me gusta. Estudia conmigo en las clases de inglés, pero aun no sé si es o no es gay. Hay otro que tampoco se definirlo, pero puedo decir q es gay con mas certeza que el anterior y tiene el nombre que marco el 2012 para mí.

Con el primero solo hay miradas furtivas y evasivas, con el segundo hay pequeñas conversaciones, pero son diálogos mínimos. Debo decir que hay un tercero que recién apareció esta semana, es más, hace dos días, es mi vecino, o creo que vive por acá. Es un poco descarado porque me mira sin disimulo. Es simpático y alto. Y esa sensación que me causa me gusta. Sería capaz de comenzarle el habla para verlo avergonzarse un poco. Lo veo como un admirador mío. No soy nada presumido ¿no?

Los dos de la clase de inglés me gustan, ambos son mayores que yo, uno más que otro. Obviamente el que me gusta más es el mayor de ambos. Es alto, pálido, castaño, maduro, abogado, es casi todo lo que me gusta en alguien. El chico del nombre, es más tierno, delgado, algo más bajo que yo, trigueño y con el pelo negro. El debe tener 4 o 5 años más que yo.

Mientras yo pesaba en estos 3 personajes nuevos en la historia de mi vida, caminando hacia el paradero después de las clases de inglés, volví a verlo. El corazón me dio un vuelco, se detuvo la ciudad por un segundo. Lo reconocí entre tanta gente. Apareció el violinista. Aquel joven casi de mi tamaño, de pelo ensortijado, con una cara pintada por ángeles se cruzo en mi camino.

Cuando lo vi por primera vez, lo vi como alguien de 20 años. Tenía camisa y pantalón formales. Era de mi tamaño. Y se veía como alguien de personalidad madura. Lo que vi ayer, era un chico de 18 o 19 años, con una mirada picara y traviesa, con unos centímetros menos que yo. Al parecer la ropa formal da una impresión diferente de la gente a como en realidad son. La ilusión voló como mariposas en primavera. Toda una tela de araña se formo en mi cabeza, pero fue contrarrestada con la desilusión de ver que no era lo que imaginé por tanto tiempo. Fui engañado por una camisa, un pantalón y zapatos con plataforma.

Es así como la ilusión se divierte conmigo. Me hace imaginar cosas, pensar otras, vivir realidades que solo son tangibles en mi mente. La timidez y la imaginación son mis mejores amigas y mis más terribles enemigos. Son unas titiriteras desalmadas que siempre controlaron mi vida y la mayor parte de este blog es su biografía.   


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