Último sol de mi 2015

Esta anocheciendo, es la última vez que veré el sol este 2015. No podía acabar mi año sin escribir. Este escrito ya no será para plasmar los errores en relaciones pasadas ni para aplicar lo aprendido en relaciones que el próximo año me traerán. Sino simplemente será un escrito de agradecimiento a estos 5 años en los que vagaba de corazón en corazón y no entendía que el corazón más grande y dulce del universo me llamaba para vivir en él. Y también hablar acerca del comienzo de mi futuro empresario.

Ha sido un año duro, recuerdo que a comienzos de año yo estaba embelesado con Dennis, no pensaba en otra persona, también por esa época comencé a forjar lo que hoy ya es una realidad y que, ahora sé,  no me equivocaba al escribir que ese sueño, el de mi negocio, me iba a costar sangre, sudor y lágrimas.

Con Dennis las cosas no funcionaron, y se me partió el corazón, un último resquebrajamiento involuntario. Se fue y vino Esteban a sanarme y a hacerme crecer. Fui muy feliz con él, me enseñó muchas cosas y a la par ya estábamos, mi amiga y yo, con nuestros primeros pedidos de tortas y cupcakes. Dios ya estaba conmigo y no lo podía ver.

Llego medio año y fue un momento decisivo, Esteban ya no me hacía sentir completo. Yo estaba feliz pero era una felicidad incompleta, sentía un agujero donde tiraba cariño de mi familia, cariño de Esteban, cariño de amigos y no se llenaba. Ese agujero tan grande solo podía llenarlo alguien igual de grande. Dios se me presentó en invierno, cuando se cansó de esperarme y mostrándome sus maravillas, me dejé vencer. No resistí y caí en sus manos. Y no he dejado de dar gracias por ese día. 
La última prueba, ahora lo veo así, era terminar con Esteban. Sucedió donde todo comenzó, en Miraflores, al lado del mar y yo viendo al cielo para que envié ángeles para lavar sus lágrimas y que pueda ir tranquilo y en calma. El cielo demoró un par de meses, pero sucedió. Ahora Esteban y yo nos llevamos bien.

Después de esa prueba, solo vinieron regalos de mi amado. El mayor de todos fue la curación de mi mamá. Los otros, (trabajo para mi empresa) llegaron cuando tenían q llegar. Me regaló también una devoción grande por la Virgen y amarla mucho. Me regaló paz interior y fuerzas para combatir (aún no soy experto en combate, pero ahí le voy). Me ha dado todo y solo tuve que decirle "Si". Mi amado es mejor que el mejor de los novios que este mundo me pueda dar. Lo mejor de todo: no le escribo por whatsapp.

Mi hermano, que estaba peleado conmigo, me pidió disculpas y otra vez pude abrazarlo cuando lo vi. Ahora también tengo 2 hermanas: mi cuñada que es como mi hermana mayor, a pesar de que soy mayor por meses, y mi hermana celestial, mi Santa Teresita que me ayudo a saber cómo llenar el agujero de mi alma.

Este año estuve perdido, fui encontrado y amado. He sido bendecido y a la vez se me han encomendado misiones. Hablar de Dios es una de ellas. El próximo año tengo que brillar para que todos vean que Dios es el que brilla en mí y sé que no me dejará solo. Seguirán mis proyectos de seguir creciendo, de avanzar con mis papás hasta donde puedan acompañarme y amaré, amaré hasta que me duela, amaré como no he amado en 25 años. No puedo decir que estoy resignado a mi suerte. Sería como estar derrotado por haber ganado el paraíso. Estoy feliz del sacrificio que esto comprende. No tener parejas no será un camino de flores, tendré tentaciones. Mi empresa tendrá problemas al igual que yo y ambos nos levantaremos frente a la adversidad.

Mi 2015 se resume en la foto y en la canción que he puesto en este post. Estoy yo en un campo verde, lleno de paz y mirando al horizonte donde una gran montaña me dice que la suba, al otro lado está mi premio. Alrededor hay obstáculos, rocas pesadas que no las puedo mover pero las puedo esquivar. Tengo que llegar a esa montaña pasando por todo el camino y luego pasando la montaña. No es fácil, tampoco imposible y al lado mío, aunque no lo vean, esta Dios. Diciéndome que Él me acompañará todo el camino. Tal vez, un día, me suelte de Su mano y me pierda; pero Él resplandecerá más fuerte que antes para que lo encuentre.

La canción se llama “Learn to fly” de Foo Fighters. Lo que puedo entender y aplicarlo a mi año es que así como yo esta persona que está cantando quiere buscar algo que le falta, una salvación, algo que le haga brillar. Por eso se mete en problemas y les dice a sus ángeles que le aguanten mientras descubre que es lo que le falta. Y al final, cuando ya se dio cuenta, les dice a sus ángeles que está bien, ya pasó la tribulación; decide hacer cambios y descubre que su solución era volver a casa, de donde salió.

Yo fui así. Me faltaba algo y lo buscaba donde no estaba, hasta que después de tantos problemas decidí ir a la solución que siempre estuvo ahí, al hogar en el corazón del Padre amado. Y hace unos minutos descubrí la canción. Otro regalo de mi Padre.


Así fue mi año que hoy termina con este último desahogo. Ya no más amores que mencionar, al menos ya no más parejas por las que sufrir. Solo sacrificios a los que me entrego feliz. Solo amor que ya me envuelve. ¿Premios? Sí, pero no en este mundo. ¿Qué más premio puedo pedir si ya lo tengo todo con Él? Adiós 2015, se va el mejor año de mi vida hasta ahora, vendrán mejores y el mejor esta adelante. Muchas gracias, buenas noches.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Sexo No

El día en que el tiempo se detuvo (por un minuto)

Rendido