No solo las hojas caen en mi otoño...

Ha sido un poco pesado, mi otoño comienza con una vista a un buen atardecer, el césped bajo mis pies y hojas de aquel árbol cayendo sobre mi cabeza… recorrí pasos ya dados, ya buen tiempo que no andaba por ahí, recordé escenas bonitas y feas al mismo tiempo, Miraflores es tan grande para sentirse tan solo y acompañado a la vez… no hay muchos sentimientos en este momento, solo una gran pesadez en el alma, un alma que quiere volar y dejar que el cuerpo se pudra con los pensamientos. Quiere ser libre pero tiene que vivir para serlo.

El sueño en que viví se deshizo… está muriendo de a pocos. Ya no deseo transformarme en un cyborg y asexuarme al punto de no poder amar a nadie. Ahora solo quiero vivir el momento con quien me toque vivir. Sé que buscar el amor está mal. El amor llega solo, eso lo sé muy bien. Pero es inevitable en mí. Es otra de mis etapas. Ya me aburriré y ahí será cuando el amor aparezca diciéndome “aquí estuve y no me viste, idiota”

También me digo que ya no cometeré el mismo error pero siempre me pasa. Me ilusiono muy rápido. No la pienso y solo actúo en la escena. Muchos momentos se pudieron evitar si tan solo no me hubiera apurado demasiado. Ya no hay mucho más que decir… solo espero que esta depresión se me pase rápido, ha sido un día para meditar y reaccionar. Aplica lo aprendido. Deja ser feliz y se feliz.